En el corazón del Périgord Negro, a pocos kilómetros del prestigioso Valle de la Vézère,
la cueva de Rouffignac es una inmensa caverna.
Fue frecuentada sucesivamente por osos de las cavernas y por artistas prehistóricos,
y conserva espectaculares testimonios.
Hay más de 250 figuraciones animales, de 160 siglos de antigüedad, diseminadas en este laberinto subterráneo.
A bordo de un tren eléctrico, la visita permite, sin cansarse, sumergirse en el universo misterioso de las cuevas y descubrir el arte de los cazadores recolectores de la Prehistoria.
Lugar privilegiado de difusión de conocimiento, la cueva de Rouffignac acoge regularmente exposiciones científicas.
Monument historique
Grottes de France
Inscrit au patrimoine mondial par l'UNESCO